Una vez más, el equipo de mayordomos y capataces ha debido ‘enfrentarse’ a un ‘complejo ejercicio’: el de confeccionar la cruceta musical de nuestra Madre del Amor Doloroso, teniendo como premisas básicas el estilo propio de la Archicofradía, las características técnicas del recorrido y las horas de esfuerzo de todos cuanto ese día se convierten en los pies de la Virgen.
Al respecto, la colaboración, la sintonía y la profesionalidad que existe con la dirección musical de la Banda de Música Municipal de Arahal es crucial. Su predisposición por ‘personalizar’ cada uno de los repertorios de las hermandades a las que acompañan es un elemento clave para terminar conformando una selección que –más que una simple enumeración de composiciones– resulta siendo todo un homenaje a la Semana Santa más clásica.
En este sentido, el Lunes Santo podremos disfrutar en la calle de dos estrenos absolutos: de un lado, de la marcha escrita por su director, José Manuel Bernal, dedicada a los hombres de trono de la Archicofradía y titulada A los pies de tu mirada, Amor Doloroso; y, de otro, a la primera interpretación en la calle de Pasión, entregada en 2015 por nuestro hermano y reconocido director y compositor, Salvador Vázquez. Dos nuevas piezas que se añaden a un cada vez más extenso repertorio de marchas propias, variado y de sutil calidad.
Por otro lado, volverán a acompasar el paso de la Virgen marchas que por distintas circunstancias no se habían interpretado en años anteriores, como Ione(Francisco Petrella), Jesús de las Penas (Antonio Pantión), Cristo en la Alcazaba (Fulgencio Morón), María Santísima del Dulce Nombre (Luis Lerate), Procesión de Semana Santa (Pascual Marquina), Dulce Nombre de Jesús o Esperanza Macarena (las dos, de Pedro Morales). A este grupo pertenece igualmente la recuperación de una composición histórica que sobresalía en los primeros repertorios musicales desde 1977 y que destaca por su sobriedad clásica: España llora; la misma, escrita por Alejandro Contreras, se inspira en el asesinato del conocido político regeneracionista José Canalejas, acaecido en 1912.
El grueso de aquellas primeras crucetas sigue siendo pauta fundamental para la elaboración de las actuales. Amarguras y la centenaria Soleá dame la mano(ambas de Manuel Font de Anta), Virgen de las Aguas (Santiago Ramos), La Estrella sublime (Manuel López Farfán) y Virgen del Valle (Vicente Gómez-Zarzuela) conforman una sinfonía eterna, consustancial y paradigmática de cada Lunes Santo de Pasión.
A éstas se han ido incorporando, con el paso del tiempo y manteniendo un carácter solemne y a la vez brillante obras como Mater mea (Ricardo Dorado), Domine Deus noster (Luis Manuel Catalá), Aquella Virgen (Manuel Gómez Arribas), Valle de Sevilla (José de la Vega), Pasa la Virgen Macarena (Pedro Gámez Laserna), Nuestra Señora de Guadalupe (Antonio Pantión), Virgen de Monserrat (Pedro Morales). Una personalidad musical que además hace guiños al carácter sacramental de la Archicofradía con las notas eucarísticas de Domus Aurea (Jaime Teixidor) o El Corpus (Braulio Uralde).
De nueva incorporación al repertorio son dos marchas procedentes, a su vez, de dos autores noveles: Reina de la O, escrita por el clarinetista de La Oliva de Salteras, Antonio D. Rodríguez; y Amor en tus lágrimas, realizada por el componente arahalense, Luis Manuel Catalá.
Para culminar esta reseña, no pueden olvidarse la interpretaciones de composiciones propias dedicadas a nuestra Madre. Además de las ya reseñadas, destacan Rosa de Pasión (Raúl Guirado) y Virgen del Amor Doloroso (Eloy García); ésta última se ha convertido, desde su estreno en 1997, en un idiosincrático himno mariano y en la única marcha que se repite hasta en cuatro ocasiones a lo largo del recorrido procesional.